En La Bretona no se ven vecinos… y nadie te ve. La casa es un refugio exclusivo donde se escucha sólo el sonido del mar y el canto de los pájaros.
La casa fue autoconstruida con amor y oficio por sus dueños: Caro y Guenole, bretón, carpintero y ebanista de profesión. Hecha íntegramente de barro y madera, con criterios ecológicos y un estilo artesanal que la hace verdaderamente especial. Grandes ventanales, impresionantes vistas al bosque y todas las ventanas con mosquiteros.
En atura, y con seguridad para recibir infancias y mascotas, La Bretona cuenta con tres amplias habitaciones: dos con cama King Size y una TWIN, con dos camas. Todas con gran ropero de madera.
Además, dos baños: uno con ducha y otro en suite con bañera con vista al bosque.
Cocina completamente equipada: lavavajillas, horno a gas y eléctrico, heladera, microondas, licuadora y más. Y un generoso cantero interior con plantas naturales y un ventanal con gorra que inunda los espacios de luz.
Salamandra de alto rendimiento para el invierno, fogonera en el exterior, y terraza de 50 m² orientada al norte, ideal para disfrutar del sol.
En total, 150 m² construidos más 50 m² de terraza, una combinación perfecta de confort, naturaleza y diseño sostenible.
Una familia grande. Dos familias amigas. Dos parejas que reciben visitas.
Casa San Antonio es perfecta para huéspedes que buscan relax, amplitud y desconexión
Ubicada a menos de 400 mts del Océano -que se cuela por los ventanales de su segunda
Nepales está situada a 350 mts del Océano, en el entorno natural
A tan solo 150 mts del mar y con kilómetros de playa virgen para caminar y bañarse,